12 de noviembre de 2010
Hay una necesidad urgente de descubrir métodos simpes y no invasivos para detectar a la enfermedad de Alzheimer en su fase precoz. La determinación de los niveles de la Abeta 1-42 (amiloide) en la saliva podría ser uno de ellos según F. Bermejo-Pareja y colaboradores.
Los autores sugieren que los niveles salivares de amiloide podrían considerarse como un marcador periférico potencial de la enfermedad de Alzheimer y ayudaría a diferenciarla de otros procesos neurodegenerativos.
Fuente: BMC neurol. 2010 Nov 3; 10(1): 108